Crónicas de Marc, Entrada LXIV, Serie Perspectivas, Capítulo 2
- holisticbridgeheal
- 1 oct
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Todas las imagenes, tanto de un grupo como del otro, están tomadas en una zona de 30m cuadrados, a no mas de 3m de mi casa, cada día elijo en cuales voy a enfocar mi atención, no es que deba negar ninguna de ellas, hay que verlas todas, pero decidimos cual mirar, una cosa es ver y la otra mirar...
Así como hacemos hacia fuera, hacemos hacia dentro, no se trata de negar nuestras sombras, nuestros desordenes, nuestros "herrumbres", hay que conocerlos y abrazarlos, pero donde vamos a sostener nuestra atención?
Vivimos en una realidad de experiencia DUAL, tanto interiormente como exteriormente, ya que como es adentro es a fuera y como es arriba es abajo (leyes universales),
pero parte de nuestra misión es sostener la frecuencia lo mas alta que podamos, y necesitamos belleza para ello, belleza interior (conexión con el Alma) y belleza exterior (conexión con la Naturaleza), pues nuestro entorno nos condiciona, entonces está en nuestras "manos" en nuestras "decisiones", en nuestras "creencias" el enfocarnos en una cosa o la otra, como en la parábola o cuento de los hermanos del norte del lobo blanco y el lobo negro...
Un día, un anciano Cherokee llamó a su nieto para contarle una historia.
Le dijo: “Dentro de cada uno de nosotros hay una batalla entre dos lobos:
Un lobo negro que lucha contra todo y todos incesantemente: es ira, envidia, culpa, resentimiento, celos, avaricia, soberbia, mentiras y ego.
Un lobo blanco que vive en armonía con lo que le rodea: es bondad, alegría, paz, amor, esperanza, gratitud, generosidad, humildad, compasión, empatía y verdad.»
El niño meditó un momento estas palabras y luego preguntó: "Abuelo ¿qué lobo ganará?"
El viejo Cherokee sonrió y respondió: “Aquel al que alimentes”.
Así es que juegan las perspectivas y las formas de ver las cosas, aunque en el caso de las cosmovisiones, culturas y expresiones particulares, el mosaico es infinito, y como partes experienciales del gran espiritu, cada uno debemos ser una experiencia diferente, cada uno le enviamos una información diferente al gran espíritu que se experiencía el mismo a través nuestro y por tanto cada uno, nos expresamos desde una mezcla diversa y concreta de la suma de lo exógeno y lo endógeno en nuestro propio caminar.
LAS culturas antiguas, o pueblos originarios que todavía siguen transmitiendo sus cosmovisiones, y que vivían e integraban en su día a día la interconexión de todas las cosas y seres en el universo, eran culturas integradoras, porque sabían que si algo o alguien estaba allí, si era algo manifesto, formaba parte del todo, por "feo" que se viera, y se esforzaban en integrarlo.
LA cultura "moderna", "actual", "capitalista", "colonizadora", se basa en la exclusión, la negación, la diferencia, niega la interconexión de todas las cosas y seres del universo, no se reconoce como parte de un todo y por tanto es exclusiva, de exclusión y de exclusividad, si llega alguien o algo y se ve "feo", lo excluimos en el mejor de los casos o lo atacamos en el peor de ellos, ya sea una persona, un inmigrante, un animal, una situación, una emoción, una enfermedad...el ego tiene bases estéticas, es una cultura basada en "lo enemigo" con tácticas de guerra en todos los campos, desde el campo de la salud al campo de la educación o la ciencia, o la política, las tendencias, tácticas, protocolos, son todos bélicos, actúa igual un militar que un doctor o un químico, Divide y vencerás...
Y si...son las dos parte de la experiencia, son perspectivas diferentes de como, o mas bien dicho, desde donde, transitar esta experiencia vital, una es lobo blanco y la otra es lobo negro y NOSOTROS, eternas e infinitas expresiones del Gran Espíritu debemos elegir, desde el respeto y la conciencia de la existencia de los dos lobos, y desde la expresión de nuestra verdad, del matiz que representamos, en total libertad y sin miedo a ser..., a cual de las dos vamos a "regalarle" nuestra atención, nuestro "mirar", que hará la función del "riego" que hará crecer una o la otra, y ser responsablemente tolerantes con los que eligen regar la que es contraria a nuestra elección, porque también debe ser amada y regada como parte del UNO.
Nuestra propia experiencia tiene también diferentes perspectivas que atender, podemos vernos desde lo físico o sólido, lo energético o emocional, o desde nuestras creencias o espiritual, son perspectivas sumamente diferentes de nuestro SER, pero la forma de gestionarlo viene siendo un poco la misma, para mi..., verlo todo, abrazarlo todo, experienciarlo todo y elegir por resonancia a cual regar en el siguiente paso, manteniendo un equilibrio sagrado, que no tiene que ser un 50/50...porque hay cosas que pesan mas que otras.
Así en nuestro interior, y para que se refleje en nuestro exterior, un buen "balance" , en mi experiencia, es un 70/30, 70 para el niño interior o lobo blanco y 30 para el ego o lobo negro, aunque personalmente me pierdo un poco en un 80/20 que obviamente me desequilibra.
Es un trabajo constante y eterno, sin principio ni final, un fractal inexcrutable.
Pero sin dejarnos abrumar por la inmensidad, poniendo un pie delante del otro y tratando de estar presentes en todo momento, este ejercicio es el que nos proporcionará las experiencias que nuestra Alma decidió vivir en esta escuelita para poder aprender, y claro..., no todas van a ser agradables.
Para no sentirnos atrapados en una u otra visión, el mejor ejercicio es "tomar perspectiva" o "abrir el zoom" o "salirse de la propia burbuja" para poder ver un plano mas abierto y ser mas objectivos y mas amables con nosotros mismos.



































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