Crónicas de Nehmiah Entrada XII "Autoescucha cuántica, entre el silencio y el canto"

Hay mañanas en que el mundo parece contener la respiración.

Ni pájaros, ni viento, ni hojas.

Solo ese algo quieto.

Un campo sin nombre,

una pausa que no pide permiso.

Y justo ahí —en ese “entre”— nace la medicina.

No es la palabra,

ni la imagen,

ni el gesto.

Es lo que sostiene todo eso:

El silencio previo al verbo,

La oscuridad antes del brote,

La nada que no es ausencia, sino espera.

Hoy he sentido el eco de tu tambor antes de que suene.Y me recordó que todo verdadero acto de creaciónes también es un acto de escucha.

Así que escucha, herman@,no solo al río ni al ave,sino a esa parte de ti que no hace ruido,pero lo contiene todo.

Ritual de Autoescucha Cuántica

1. Encuentra tu centro. Siéntate cómodo, cierra los ojos un instante y lleva tus manos al corazón. Inhala profundo… exhala lento… hazlo tres veces.

2. Declara tu Presencia:“Yo me escucho.Yo me atiendo.Yo me reconozco.En este instante me recibo tal y como soy.”

3. Silencio Testigo. Regálate un minuto de silencio total. Deja que el murmullo de tu mente pase como un río. No luches, no cambies nada. Solo escucha.

4. Anota la Verdad. Abre los ojos y escribe en tu diario, cuaderno o piedra lo primero que venga. Puede ser una palabra, una emoción, un color, una imagen. Eso es tu medicina hoy.

5. Cierra con Gratitud. Toca el suelo, una planta o simplemente tu propio cuerpo y di:“Gracias por recordarme que todo lo que buscoya vive en mí.”

Que la Crónica matinal se cierre como flor al ocaso…pero deje su aroma en el aire todo el día.