Crónicas de Nehmiah Entrada XVI, "Crónica de la Tierra: El monstruo y la profecía"
- holisticbridgeheal
- 10 may
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Se dice que en los tiempos antiguos, cuando el calendario era circular y los pueblos leían el cielo como un libro abierto, los sabios del Tahuantinsuyo ya conocían el patrón de los ciclos. Cada cierto tiempo, a la humanidad se le enviaba una prueba: un monstruo, un arquetipo de desequilibrio. Un espejo distorsionado que revelaba el nivel de conciencia colectiva.
Primero vinieron los monstruos del miedo, del poder, del olvido. Uno a uno fueron llegando, como oleajes que barren lo frágil y prueban lo verdadero. Pero en este tiempo, a las puertas del Quinto Sol, llegó el más grande de todos:el Gran Monstruo del Consumismo,el devorador insaciable,el que transforma la vida en mercancía,el que arranca minerales del corazón de las montañas y los vuelve joyas, armas o pantallas.
Los abuelos lo vieron venir. Y sabían que este no se vencía con flechas ni con fuego. Este monstruo exige una revolución del alma. Por eso partieron.Subieron al Cóndor. Caminaron hacia el norte y hacia el sur. Cruzaron valles y selvas, anunciando a las tribus de Abya Yala que el tiempo había llegado. Que la prueba sería dura, pero necesaria.La leyenda dice que para esta batalla, no bastarían los pueblos originarios.Habría que invocar también a las tribus dormidas del otro lado del océano.Las que olvidaron que eran tierra. Las que creyeron que eran superiores a la Madre que las parió.
Este es el tiempo del despertar.
El monstruo ya mostró su rostro:En los ríos convertidos en cementerios.En las montañas abiertas en canal por la minería.En los vientres femeninos silenciados.En los niños que heredan un planeta como un basurero.Y en el alma del humano moderno, adicta al ruido y desconectada del humus.
Pero no está todo perdido.Porque hay quienes recuerdan.Quienes escuchan el susurro de las raíces.Quienes aún ofrecen su canto al fuego y su cuerpo a la siembra.Quienes saben que el código 2 (yo-tú, lucha-dominio, miedo-deseo) ya no sostiene la danza.Y que ha llegado el momento de caminar hacia el código 4:Tierra, Agua, Aire, Fuego.Cuerpo, alma, comunidad, cosmos.
Los Hijos del Sol están despertando.Ya no tienen una sola lengua ni un solo color.Pero llevan en el pecho la misma misión: recordar a la humanidad su vínculo sagrado con la Tierra.
Esta crónica no es un lamento.Es una ofrenda.Un tambor que late desde el Oeste, donde se oculta el sol y nace el misterio.

Ritual final
Hoy, párate descalz@ sobre la tierra.Cierra los ojos.Escucha el murmullo del humus, los cantos invisibles de las lombrices, la memoria que guardan las piedras.Y dile en voz alta:
"Madre, no estoy distraíd@.Recuerdo de dónde vengo.Aquí estoy. Con los pies en tu pecho y el corazón abierto.Por todas mis relaciones. Por todo lo que vive.Soy semilla del Quinto Sol."



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